El estrés laboral es una de las principales causas de ausentismo, baja productividad y rotación de personal. Las empresas que apuestan por mejorar el bienestar emocional de sus colaboradores no solo generan entornos más saludables, también cumplen con la NOM-035-STPS-2018, la norma que regula los factores de riesgo psicosocial en los centros de trabajo.
En este artículo te compartimos algunas acciones sencillas y efectivas que puedes implementar en tu organización para mejorar el ambiente laboral y cuidar la salud mental de tu equipo.
1. Establece pausas activas
Incorpora pausas activas breves (de 5 a 10 minutos) durante la jornada. Estas actividades físicas simples ayudan a liberar tensión, activar el cuerpo y reducir la fatiga mental. Además, fortalecen la convivencia entre compañeros.
2. Fomenta la comunicación abierta
Crea canales y espacios donde el personal pueda expresar sus inquietudes, ideas y sugerencias. Una comunicación clara y horizontal ayuda a reducir la incertidumbre, mejora las relaciones laborales y disminuye el estrés.
3. Ofrece apoyo emocional
Capacita a líderes y supervisores para identificar señales de estrés en su equipo. También puedes contar con apoyo externo, como programas de atención psicológica o alianzas con clínicas especializadas que brinden orientación emocional.
4. Promueve el equilibrio trabajo-vida personal
Respeta los horarios laborales y evita la sobrecarga de tareas. Fomentar una cultura que valore el tiempo libre y el descanso mejora el rendimiento y la salud mental del personal.
5. Cumple con la NOM-035-STPS-2018
Esta norma establece la obligación de identificar, analizar y prevenir los factores de riesgo psicosocial en el trabajo. Al aplicarla correctamente, no solo reduces el estrés laboral, también fortaleces la cultura organizacional y disminuyes riesgos legales.
Puedes consultar la NOM-035 completa aquí:
👉 https://www.dof.gob.mx/nota_detalle.php?codigo=5541828&fecha=23/10/2018
Conclusión:
Un entorno laboral sano es responsabilidad de todos, pero comienza con acciones concretas desde la dirección y los líderes de equipo. Invertir en el bienestar emocional de tu equipo no solo es una buena práctica: es una estrategia empresarial que mejora el desempeño y el compromiso organizacional.